Abriendo este enlace podréis escucharlo, con la voz de Elda Hidalgo C. Queda precioso. Más abajo tenéis el texto.
El amanecer observaba de continuo a las personas: cada día más agitadas, distanciadas, egoístas y encerradas en
sí mismas, empeñadas en repudiar las diferencias en lugar de enriquecerse con
ellas. Muy pocos quedaban ya que distinguieran ni valorasen la felicidad que
tenían; y, por tanto, la desperdiciaban, buscándola donde no estaba. «En los
buenos tiempos me prestaban atención y me apreciaban —se lamentó—, pero ya no le intereso a nadie». Decepcionado y
vacío por tanta indiferencia, determinó ausentarse durante un largo periodo. Colgó
el cartel de Cerrado por desencanto, y desapareció. Con el paso del
tiempo, la soledad y el silencio lo fueron deprimiendo, así que un día decidió
asomarse con sigilo, solo para echar un rápido vistazo. Se encontró un mundo
apagado y taciturno: los poetas y cantantes enmudecidos, las pinturas se desteñían,
los enamorados languidecían y todos, en general, solo encontraban vacío... Se
sintió culpable y desolado. El mundo advirtió su presencia y clavó sus ojos en
él con entusiasmo. Al instante, las sonrisas salieron a la calle, se
desbordaron los abrazos de “sin mirar a quién”, los corazones latieron hermanados.
Ese día se escribieron los mejores versos, se pintaron los más hermosos cuadros,
se compusieron las melodías más armónicas. La vida se llenó de amor. Entonces,
el amanecer se supo necesario. Conmovido, derramó lágrimas de fuego sobre el
horizonte, hasta incendiarlo de esperanza.
Tina, que razon tienes con lo de "Cerrado el Amanecer". Qué nos esta pasando, la pantallita que nos metieron en la cabeza, no nos deja ver que hay vida detras de ella. La que hasta no hace mucho hacía hasta que la gente se enamore, se amigue, estudie, lea y ademas ria y haga proyectos para un futuro. Será mucho o ya es demaciado tarde.
ResponderEliminarEsperemos que no sea tarde, aunque parece ser que el mundo funciona de forma cíclica, y no parece que se tenga muy en cuenta los hechos, errores, atrocidades que la historia nos enseña. Gracias por comentar.
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