Hace poco vi una técnica, que circulaba por el WhatsApp para quitarle los granos a dicha fruta. Según lo veías, parecía ser la cosa más fácil del mundo y... ¡TAN LIMPIO!
Lo probé al día siguiente, en cuanto compre una granada. Yo intento aplicar los buenos inventos o recetas. Aparentemente todo es fácil, pero, a la hora de la verdad..., tiene su intríngulis. No quedó mal, pero no tardé poco. Sé que de tenerlas que desgranar así, acabaría no haciéndolo.
Luego busqué y busqué en Internet y encontré métodos parecidos, algunos mas y algunos menos complicados. Al final decidí seguir con la técnica que me enseñaron hace un tiempo, y que os muestro en imágenes:
1.- Se corta al medio.
2.- Se ahueca la cáscara tirando de los lados, alrededor, estirándola o apretándola. Sin romperla, esto es muy importante.
3.- Por último, se golpea con la parte plana de una cuchara hasta que se desprendan todos los granos.
Limpiad un poco los restos. Es una opción bastante aceptable. Si no lo habéis hecho ya de este modo, probad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario